La soledad: cómo ayudarse a sí mismo y a los demás

Escrito por Stannah

Según la última Encuesta Continua de Hogares del Instituto Nacional de Estadística de Uruguay, correspondiente al año 2019, el 19,8% de las personas mayores de 65 años vivían solas en Uruguay. Es posible que esta cifra haya cambiado en el 2020 y 2021 debido a la pandemia de COVID-19 y sus medidas de distanciamiento social.  

Actualmente, se cree que muchas personas mayores pueden pasar un mes entero sin tener una conversación o algún contacto con sus familiares o amigos. 

Es difícil saber cómo ayudar a alguien que se siente solo. Para hacerlo, aquí tiene 7 ideas que puedes sugerirle a un ser querido o aplicárselo a sí mismo para afrontar la soledad durante la tercera edad. 

Salga de casa

A medida que envejecemos, salir de casa a diario puede resultar más difícil. Pero, obviamente, es más probable que se encuentre con gente conocida y entable una conversación si sale a la calle.

Ya sea si va de tiendas y habla con los dependientes, o simplemente da un paseo por el barrio o charla con el vecino, salir a la calle aumentará sus posibilidades de socializar y de distraerse.

Adopte una mascota

Hay estudios que demuestran que tener una mascota puede mejorar considerablemente su salud mental y física, además de ayudarle a superar la soledad. La compañía de un gato o un perro son muy enriquecedoras, ¡No importan el tamaño ni la raza! Si le es posible, ¿por qué no invertir su tiempo en una mascota que le proporcionará un amor incondicional? 

Si se trata de un perro, este no solo le proporcionará entretenimiento y seguridad en casa, sino que también le obligará a salir y le ayudará a mantenerse activo. Pasear al perro es una forma increíblemente buena de conocer gente.  

Mantenerse conectado 

Las redes sociales pueden abrumarle un poco al principio, pero las ventajas de participar en ellas son innumerables. Recuperar el contacto con viejos amigos puede ser muy gratificante en la tercera edad, y plataformas como Facebook hacen que ahora sea más fácil que nunca.  

Skype, WhatsApp y FaceTime le permiten ver a sus seres queridos y charlar un rato con solo pulsar un botón, lo que es una gran ventaja si vive lejos de ellos. 

Aproveche las asociaciones locales 

Participe en las actividades de su ciudad o su barrio. Hay asociaciones para casi todos los intereses, desde senderismo hasta dominó o cartas, o incluso puede probar alguna actividad nueva.  

Es una buena forma de conocer gente y de tener reuniones sociales periódicas. En definitiva, la proactividad es clave en la tercera edad si quiere encontrar y desarrollar amistades duraderas. 

Dedicar tiempo a alguna causa 

Las asociaciones benéficas buscan constantemente personas que quieran aportar su tiempo en favor de una buena causa. La jubilación le ofrece la oportunidad perfecta para hacerlo, así que ¿por qué no visita una asociación benéfica local y pregunta si necesitan ayuda? ¡Seguro que será muy gratificante!  

Igualmente, algunas iglesias realizan actividades para la comunidad con la ayuda de voluntarios. Ya sea para ayudar con diferentes tareas o colaborar en la fiesta local, este es otro lugar acogedor para socializar. 

Organice un plan que le ilusione 

¿Por qué no organiza un plan que le apetezca con amigos o familiares? Es una forma magnífica de pasar un buen rato juntos. A veces es difícil coincidir con la familia y los amigos porque hoy en día todo el mundo está muy ocupado.  

Pero si reserva un día con antelación, será más fácil que estén disponibles y tendrá un evento que esperar con ilusión. También puede organizar una quedada periódica, aunque sea algo sencillo, como un café a la semana. 

Viajar es otro proyecto emocionante que esperar con ilusión. ¿Qué le parece una escapada anual? Por ejemplo, hay muchas excursiones en tren o autobús para pasar un día en la playa o en el campo, así que ¿por qué no aprovecha alguna de estas oportunidades?  

Nunca sabe a quién acabará conociendo, o a qué le puede llevar. Si le apetece algo más exótico, también existen cruceros para personas que viajan solas, por lo que no hay necesidad de ponerse nervioso, ya que todos estarán en el mismo barco (literalmente). 

Hable con alguien

Si tiene problemas de movilidad y cree que la soledad está afectando a su salud mental, existen líneas telefónicas de ayuda que le ofrecen una voz amable con quien charlar.  

Tampoco hay que avergonzarse de decir a los amigos o a la familia que se siente solo. Una vez que dé a conocer estos sentimientos, será mucho más fácil que la gente de su entorno le ayude.  

Como dijo el escritor Oscar Wilde: “Al fin y al cabo, el vínculo de toda compañía, ya sea en el matrimonio o en la amistad, es la conversación”. 

Referencias